Las aplicaciones que necesitas para tu PC pueden depender de tus necesidades específicas y el tipo de trabajo que realices. Sin embargo, aquí hay algunas categorías de aplicaciones que son comunes y útiles para la mayoría de los usuarios:
1. Navegador web: Para acceder a Internet. Ejemplos incluyen Google Chrome, Mozilla Firefox, Microsoft Edge.
2. Suite de productividad: Para realizar tareas de oficina y gestionar documentos. Microsoft Office, Google Workspace (anteriormente G Suite) y LibreOffice son opciones populares.
3. Antivirus y software de seguridad: Para proteger tu PC contra malware y amenazas en línea. Ejemplos incluyen Windows Defender, Avast, AVG, Norton, entre otros.
4. Reproductor multimedia: Para reproducir música y videos. Puedes usar reproductores como VLC Media Player, Windows Media Player o reproductores específicos de música como Spotify.
5. Herramientas de compresión de archivos: Para comprimir y descomprimir archivos. WinRAR y 7-Zip son opciones comunes.
6. Navegador de archivos: Facilita la gestión de archivos en tu sistema. Windows Explorer en Windows, Finder en macOS y Nautilus en Linux son ejemplos.
7. Cliente de correo electrónico: Para gestionar tus correos electrónicos. Microsoft Outlook, Mozilla Thunderbird y aplicaciones web como Gmail son opciones populares.
8. Software de mensajería: Para comunicarte con otras personas. Ejemplos incluyen WhatsApp, Telegram, Skype o Slack.
9. Software de edición de imágenes: Para editar fotos y gráficos. Adobe Photoshop, GIMP y Canva son ejemplos.
10. Software de edición de video: Para editar videos. Adobe Premiere, iMovie (para macOS), y DaVinci Resolve son opciones populares.
11. Lector de PDF: Para ver y editar archivos PDF. Adobe Acrobat Reader y Foxit Reader son opciones comunes.
12. Aplicaciones de redes sociales: Si utilizas redes sociales, puedes instalar las aplicaciones correspondientes, como Facebook, Twitter, Instagram, LinkedIn, etc.
Recuerda que esta lista es general y puede ajustarse según tus necesidades y preferencias personales. También, ten en cuenta que algunas aplicaciones pueden tener alternativas gratuitas y de código abierto que pueden satisfacer tus necesidades.